Las Grullas, fieles con su cita en la Comarca Miajadas-Trujillo
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20 de diciembre de 2012 Fuente: ADICOMT
Fieles a su cita anual, a finales de Octubre llegaban las primeras grullas a sus cuarteles de invierno en la Península Ibérica y por ende a la Comarca Miajadas-Trujillo, anunciando la llegada inminente de los primeros fríos. Las grullas abandonan sus áreas de cría en la Europa más septentrional, principalmente en Finlandia, Rusia occidental, Polonia, Escandinavia, Dinamarca y el norte de Alemania, cuando las inclemencias climatológicas y la disminución de las horas de luz solar hacen difícil conseguir el suficiente alimento. Es esto lo que las empuja a volar miles de kilómetros hasta nuestro país, donde la climatología es más benevolente y el alimento es mucho más abundante.
A principios de la invernada, buscan en las siembras y rastrojos de cereal y arroz los tiernos brotes, granos, invertebrados y algún pequeño vertebrado. Pero su alimento preferido es la bellota, desplazándose en grandes bandos a las zonas de dehesa cuando este fruto madura.
A pesar de que en la época de cría es una especie territorial (cada pareja defiende su zona de cría frente a la invasión de otras grullas), durante la invernada se comporta de forma gregaria (formando grandes bandos), acentuándose este comportamiento en los dormideros, existiendo algunos que llegan a congregar a más de 10.000 individuos.
En el territorio ADICOMT existen varias zonas de invernada: Zorita, en el entorno del Pantano de Sierra Brava y Pizarro y Casar de Miajadas, en el entorno de las Vegas Altas del Guadiana enclaves incluidos en la zona que abarca el sector Zona Centro; y en el territorio que abarca el Sector Almonte las encontramos en Torrecillas de la Tiesa y La Aldea del Obispo.
La grulla es un ave muy popular en la Comarca Miajadas-Trujillo y los motivos son su gran tamaño, se trata de nuestra ave de mayor estatura, su inconfundible voz y su espectacular comportamiento, que difícilmente deja indiferente al observador lo que ha llevado al sector turístico de la zona, a incluir este recurso como un atractivo importante durante su época de invernada en nuestros campos. Durante la invernada, la grulla común sigue una rutina diaria muy marcada: reposo nocturno en dormideros comunales y dispersión durante las horas de luz por las áreas de alimentación próximas. La disponibilidad de alimento en dehesas y/o cultivos y de lugares adecuados para albergar un dormidero, son los dos factores clave que permiten el establecimiento de un área de invernada. Y este territorio, desde el último censo realizado en el 2007 y a merced de las primeras cifras que arroja el censo que en la actualidad se está elaborando y cuyos datos se publicarán próximamente, ha sufrido un importante aumento del número de grullas que pasan el invierno en él.
Esta evolución del número de grullas en el territorio ADICOMT viene favorecida por factores como el aumento de algunos cultivos en las Vegas Altas tales como el arroz y el maíz y el grano que con su cultivo se queda en el suelo, a lo se suma la escasa molestia debido a la ausencia de ganado y el fangueo de las tierras arroceras dejando al descubierto gran cantidad de larvas, gusanos y otra fauna del suelo ,lo que supone un atractivo añadido para estas aves convirtiendo las tablas de cultivo en dormideros y evitando su desplazamiento a la zona de pantano.
Mientras que la grulla es frecuente en numerosas áreas en toda Extremadura, es necesario dirigirse a zonas muy concretas del resto de comunidades para encontrarla . Las provincias más importantes por la población de grullas invernantes son Badajoz y Cáceres y la cuenca extremeña del Guadiana, con 60.566 grullas (40% del total, 75% de Extremadura), es sin duda la principal área de invernada para la grulla común en España y Europa. Esta importante población de grullas en las Vegas del Guadiana y los factores antes destacados se puntan como factores incidentes en el aumento del número de grullas que el trabajo censal actual está apreciando.
En la Comarca Miajadas-Trujillo no ha dejado de crecer el interés de ornitólogos y aficionados por esta especie, lo que ha llevado al sector turístico a prepararse para atraer a un mayor número de turistas de naturaleza, en temporada baja como es otoño-invierno, así como a fomentar su capacidad para ofrecer un servicio diferenciado y de calidad.
Estas aves protagonizan unos vuelos espectaculares sobre los cielos de nuestros campos sorprendiendo a los visitantes y ofrecen una estampa idílica e inigualable al atardecer, cuando por cientos acuden a los espacios que les sirven de dormideros. Para disfrutar de este espectáculo en todo su esplendor y conocer el entorno, ADICOMT te invita a conocer su territorio.
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