La consejera de Agroganadería de Asturias, María Jesús Álvarez: "El Gobierno central debería financiar la mitad de los proyectos rurales, es lo justo"

El Gobierno del Principado cerró el pasado martes en Madrid el reparto de los fondos de desarrollo rural de la política agrícola comunitaria (PAC) para el período 2014-2020, de los que Asturias se lleva 325 millones de euros, 19 millones más sobre la dotación de la anterior etapa. La consejera de Agroganadería, María Jesús Álvarez, (Peñaullán, Pravia, 1962), señala que el presupuesto permitirá diseñar un buen plan para crear empleo en el campo asturiano. A la vez, pide no caer en triunfalismos, porque aún faltan por distribuir las ayudas directas de la PAC europea, que hasta ahora dejan en la región unos sesenta millones de euros anuales.

-Asturias obtiene 19 millones más de los fondos de desarrollo rural hasta 2020 respecto al período anterior, tras negociar en una mesa con trece comunidades gobernadas por el PP, más Navarra y País Vasco, con UPN y PNV, y Andalucía, única región, con Asturias, en manos socialistas. ¿Ha sido fácil sumar aliados para convencer al Gobierno de Rajoy?

-Los grandes apoyos los hemos encontrado en comunidades con sistemas productivos similares al nuestro, como Galicia y Cantabria. En la defensa de los nuevos pagos asociados a la producción de leche y carne hemos tenido una aliada en la consejera de Castilla y León, que también es del PP. Así que el color político ha tenido poco que ver esta vez.

-El martes regresó de Madrid con una parte de los deberes hechos, pero aún queda el reparto de las ayudas directas...

-Estamos frente a una nueva política agrícola común, diferente a la actual. A pesar del éxito en la asignación de los fondos para desarrollo rural, insisto en que sentimos que esta reforma agraria haya sido una ocasión perdida para aplicar una PAC distinta que realmente prime la actividad productiva en el campo, ligada a la producción de alimentos de calidad, sector en el que Asturias cumple al máximo.

-Esta PAC es la menos "común" de todas. ¿Será un primer paso hacia su desaparición?

-Los estados tienen más poder que nunca para adoptar criterios de reparto. Por eso en Asturias incidimos en los aspectos que tienen mucha importancia para nosotros, como la distribución de los pagos asociados a carne y leche, que no será lineal, sino que valorará peculiaridades de los territorios, tal como pedimos. Seguiremos con esa reivindicación constante. Así lo hicimos con las partidas de desarrollo rural. En esecaso nuestros argumentos han sido atendidos.

-¿Los 325 millones para desarrollo rural quedan ensombrecidos por el descenso del porcentaje de cofinanciación estatal en los proyectos, que pasa del 50% al 30 por ciento?

-El Estado aún está a tiempo de rectificar y es el Ministerio de Hacienda el que debe hacerlo. Me parece razonable que se reparta por igual entre las administraciones. El 50 por ciento para cada uno es lo más justo. El Gobierno de Rajoy debe asumir la parte que le corresponde, lo contrario supone exigir un esfuerzo mayor a las regiones. En cualquier caso, ya adelanto que este Gobierno no va a dejar de atender su compromiso con el medio rural.

-Ahora toca diseñar un nuevo Plan de Desarrollo Rural (PDR) en el que Asturias parte de la labor hecha en los años anteriores. ¿Donde están las nuevas oportunidades de empleo en el campo?

-Vamos a hacer un buen PDR con transparencia y participación, en sintonía con las directrices europeas que buscan cada vez más la implicación ciudadana en los asuntos públicos, porque los ciudadanos tienen que reconocerse en lo público. Queremos presentarlo a la Comisión a mediados de año. Preparamos un análisis estratégico para valorar líneas concretas. Los objetivos son el desarrollo económico, la cohesión territorial y el mantenimiento de la población.

-¿Pero qué negocios podrán recibir subvenciones?

-Estamos en un momento preliminar. Lo que está claro es que el "Leader" es un eje obligatorio y Europa valora mucho la forma de trabajo, de abajo arriba. Quedan muchos sectores por explorar. En Asturias también tenemos ya experiencias muy novedosas, como la de una empresa que hace "catering" para mayores del medio rural.

-¿Entonces los grupos que conforman la red de desarrollo rural tienen garantizada su continuidad?

-De todo eso hay que hablar. Ahora tenemos que centrarnos en hacer ese plan. No hay que adelantarse, conviene ir paso a paso.

-Los "cazaprimas", a los que alude el ministro de Agricultura, no desapareen por completo de la lista de beneficiarios de la PAC, pero habrá menos. ¿Es suficiente para realizar un reparto más equitativo de los fondos?

-En estos meses ha calado la importancia de que el dinero llegue a quienes de verdad producen y hacen que haya vida en los pueblos. Todo lo que sea sacar del sistema a quienes no cumplen esas premisas es bueno. Habilitar como agricultor con derecho a ayudas a quien reciba en renta agraria el equivalente al 20 por ciento de las subvenciones que tiene asignadas no es nuestro modelo, pero no está mal. Es iniciar un camino para que esos "cazaprimas" salgan del sistema, como dice el Ministro, y que no se cobre por no producir.

-¿Le hubiera gustado un sistema de reparto como el adoptado en Francia por el Ejecutivo de Hollande, con tramos de ayuda que benefician a las pequeñas explotaciones?

-Hollande va en la línea de apoyar a los sectores productivos y a las pequeñas explotaciones frente a las grandes. Quizá lo están enfocando mejor que nosotros. Tienen una trayectoria diferente. España es muy diverso y debemos atender a un modelo más plural.

-Entre los problemas "caseros", aún colea la petición de libertad para la osa "Molinera". ¿Reconsiderará su postura?

-Cuando la osa fue rescatada, estuvo a punto de morir y salió adelante. Todo lo que sucedió se basa en informes técnicos y científicos. Se la intentó reintroducir en el monte y después de casi un mes manifestó un comportamiento que no permitía mantenerla en el medio natural. Sigo las recomendaciones de quienes saben. Es curioso, pero quienes rechazan que esté en Proaza quieren llevarla a otros cercados. No me parece razonable tener un cercado en cada concejo.

-Al menos, ¿piensan trasladarla al cercado grande?

-Se hará como digan los técnicos. Me parece que el sentido común nos lleva a eso, siempre poniendo por delante la opinión de los expertos.

-¿Se arrepiente de su famosa foto acariciando a la osa que le valió numerosas críticas?

-La foto fue una anécdota. Quienes nos dedicamos a la política siempre estamos expuestos a críticas.

 -¿Volvería a posar con "Molinera"?

-Yo creo que sí. Por qué no...

-La dimisión de Odile Rodríguez de la Fuente como presidenta de la Fundación Oso Asturias abre la puerta a otros candidatos. ¿Considera algún nombre?

-Pues no. Ella nos transmitió su intención de no continuar y, una vez que convoquemos al patronato, la decisión se hará efectiva. Todavía es la presidenta sobre el papel. Quiero agradecerle que se haya implicado en la entidad, porque sé que tiene mucho trabajo con la Fundación Rodríguez de la Fuente. Me consta que ésa es una de las razones por las que toma su decisión. No es una mujer de compromisos a medias. En todo caso, sería fantástico que reconsiderase su postura.

-Al sector forestal también lo tiene revuelto. Los ecologistas rechazan las nuevas plantaciones de eucaliptos y los empresarios denuncian el incumplimiento de las inversiones que establece el plan forestal

-El Consejo Forestal ha considerado que aún tenemos margen para plantar y se autorizan sólo plantaciones que cumplen con la normativa regional, no estamos desregularizando nada. En todo caso, ya hemos iniciado la revisión del plan forestal.

-La biomasa no está incluida en el texto actual...

-Es una de las cosas que hay que reformar. Precisamente en el proyecto de Presupuestos no aprobado va un parque de acopio de astilla en Pesoz, un proyecto que vamos a intentar rescatar, aun con el escenario de prórroga.