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Entrevista a Ana Fernández, gerente de MENDINET, asociación impulsora del proyecto de cooperación interterritorial ‘+Vino-CO2’

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Desarrollo Rural

29 de noviembre de 2013 Fuente: REDR

El proyecto "Más vino, Menos CO2" se fraguó a lo largo del año 2010, participando en el mismo cinco territorios rurales de diferentes Comunidades Autónomas de España.

  • Los participantes del proyecto son MENDINET; el Grupo de Acción Local Zona Media de Navarra; la Asociación para el Desarrollo de las Tierras del Moncayo (ASOMO); el Consorci Leader Priorat-Baix Camp; la Asociación Mallorca Rural; e Integral, Sociedad para el Desarrollo Rural

El proyecto "Más vino, Menos CO2" se fraguó a lo largo del año 2010, participando en el mismo cinco territorios rurales de diferentes Comunidades Autónomas de España, manteniendo un importante rasgo común como es la importancia del sector vitivinícola en su desarrollo económico, así como suponer un importante rasgo social y paisajístico de los mismos. Los participantes del proyecto son MENDINET; el Grupo de Acción Local Zona Media de Navarra ; la Asociación para el Desarrollo de las Tierras del Moncayo (ASOMO); el Consorci Leader Priorat-Baix Camp ; la Asociación Mallorca Rural ; e Integral, Sociedad para el Desarrollo Rural.

El proyecto Más Vino Menos CO2 desarrolló una Calculadora de Huella de Carbono diseñada específicamente para el sector vitivinícola. Se trata de una calculadora, cuyo funcionamiento se basa en un extenso inventario que recoge todos los procesos habituales en la viticultura y en la elaboración del vino (ciclo de vida del producto), y es mediante la recopilación de estos datos propios del funcionamiento de las bodegas, como calcula las emisiones de CO2 asociadas a cada uno de los caldos.

El cálculo de estas emisiones, conocido comúnmente como la Huella de Carbono, facilita la adopción de acciones por parte de las bodegas para mejorar el impacto ambiental derivado de la producción de sus vinos.

 

Entrevistamos a Ana Fernández, gerente de MENDINET, para que haga una valoración sobre el desarrollo y ejecución del proyecto.

1) ¿Cómo surge la idea del proyecto? ¿Qué os hizo apostar por esta idea?

Existe consenso entre la comunidad científica internacional de que nos encontramos en un cambio climático sin precedentes, y que éste es originado por las actividades humanas. Los retos a los que se enfrenta la sociedad actual son, por un lado activar los mecanismos necesarios para reducir el cambio climático, y por otro tomar las medidas necesarias para mitigar sus efectos negativos.

En agricultura en general, y en vitivinicultura en particular, los retos son: mantener más o menos la producción actual disminuyendo los consumos energéticos, mantener los recursos y la biodiversidad. El balance energético, al realizarse al margen de las ayudas económicas, pone al descubierto los manejos más eficientes y por tanto más recomendables para cada región agroclimática. Para ello es necesario analizar los costes energéticos de la producción del vino, a fin de demostrar que su producción contribuye positivamente a impedir o retrasar el Cambio Climático.

Además el proyecto permitirá generar un valor añadido a la producción del vino. Las pequeñas bodegas no tienen capacidad de trabajar en la puesta en valor del beneficio que su labor tiene sobre el Medio Ambiente. En este sentido, el proyecto va a permitir que el sector avance en la calificación medio ambiental de sus productos para poder competir con las bodegas potentes y poder entrar en los mercados más exigentes.

Por otra parte, la generación de un nuevo valor añadido en el producto permitirá generar empleos de calidad y/o mejorar la empleabilidad de los habitantes del territorio. Serán necesarias personas formadas para auditar y certificar que las buenas prácticas vitivinícolas contribuyen a frenar el Cambio Climático.

2) Una vez que el proyecto ya se ha ejecutado, ¿podrías hacer una valoración?

Desde el punto de vista de los grupos participantes la valoración es muy positiva en todo el desarrollo del proyecto. Se han ejecutado acciones concretas cuyos resultados han sido visibles y notables. Se ha tratado de llevar una dinámica con actuaciones concretas que mostraran el avance del proyecto.

En cuanto a las bodegas, la implicación en las actuaciones ha sido muy activa y se han implicado en el desarrollo de las mismas. Entendemos que las mejoras propuestas para la optimización de sus procesos se han acogido de manera muy positiva. Incluso hemos recibido peticiones de seguir trabajando en la misma línea.

3) ¿Qué beneficios puede aportar esta iniciativa a diferentes niveles?

A través del proyecto se espera:

  • Qué los vitivinicultores del territorio sean conscientes de la importancia que tienen las prácticas que reducen la emisión del GEI a la hora de frenar el Cambio Climático y que las utilicen.
  • Que los vitivinicultores dispongan de una metodología de trabajo que les permite certificar que su producto ha sido producido mediante técnicas que conservan el Medio Ambiente.
  • Formar a personas del territorio para que sean capaces de auditar y certificar a las pequeñas bodegas del territorio.
  • Generar empleo y/o mejora de la empleabilidad de las personas asociado a auditar y certificar a las bodegas.
  • Poner en valor el papel de la mujer en un sector altamente masculinizado

El proyecto corrige desequilibrios medio ambientales mediante el fomento de prácticas agrícolas que disminuyen la emisión de GEI. Corrige desequilibrios socioeconómicos y laborables aportando mayor valor añadido a los productos del territorio, generando empleo de calidad y mejorando la empleabilidad de los habitantes del territorio.

4) ¿Crees que esta iniciativa es exportable a otros territorios nacionales y/o internacionales?

Los distintos territorios hemos elaborado estrategias individuales para conseguir los objetivos antes reseñados; la cooperación nos va a permitir actuar de forma más eficiente en la resolución de los problemas del sector vitivinícola, estableciendo sinergias entre los distintos territorios y sectores implicados. El coste de estas acciones sería mucho mayor de forma individual y en muchos casos inalcanzables para los distintos participantes.

En cualquier caso, la metodología aplicada es exportable a cualquier región vitivinícola e incluso a otros subsectores.

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