El documento 'El futuro que queremos' cerró la Cumbre de Río+20 sobre desarrollo sostenible
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22 de junio de 2012 Fuente: REDR
Las delegaciones nacionales de los diferentes países participantes consensuaron un documento de mínimos sobre el futuro del planeta en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (Río+20), celebrada esta semana en Río de Janeiro (Brasil).
El texto final es el resultado de un consenso alcanzado entre los negociadores el martes pasado, un día antes del inicio de la sesión de alto nivel, y recibió críticas por parte de las organizaciones ambientalistas y las entidades de la sociedad civil, que lo tildaron de poco ambicioso, frustrante y decepcionante.
El documento puede ser modificado por los jefes de Estado y Gobierno presentes en la Cumbre, para incorporarle algunas de las reivindicaciones de esas organizaciones.
Funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas y del país anfitrión han reiterado que el texto aprobado por los negociadores y que fue presentado por Brasil ante la falta de acuedo en las tres citas del Comité Preparatorio es el mejor posible, porque logró el consenso entre los diferentes países participantes en su discusión.
La posición del Reino de España, presentada por el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, apuesta por "una transición justa hacia una economía verde, que tiene el potencial de contribuir al desarrollo sostenible a la vez que avanza en la erradicación de la pobreza".
El Estado español considera que "la economía verde debe promover una adecuada gestión de los recursos naturales y e uso eficiente del capital natural. La eficiencia en el uso de los recursos naturales desempeña un papel central en la estrategia 2020 de la Unión Europea para un crecimiento inclusivo, sostenible e inteligente".
El Ministerio de Agricultura señala en su documento de posicionamiento que "los estrechos vínculos entre la conservación del capital natura y el mantenimiento de nuestro desarrollo y bienestar son cada vez más patentes. Los productos de la naturaleza son la base de nuestros recursos alimentarios, así como un recurso fundamental para garantizar el suministro de madera, medicamentos, energía y otras materias primas".
Desde el punto de vista del agua, la posición española sostiene que "es necesario llevar a cabo una gestión integrada de los recursos hídricos, así como realizar actuaciones encaminadas a mejorar la calidad de las aguas e incrementar la eficiencia en su uso".
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