REDR

El Gobierno de Cantabria pondrá en marcha la próxima semana un programa en nueve comarcas de la comunidad autónoma cuyo objetivo es que aflore la violencia de género muchas veces oculta en el medio rural, donde, según las estadísticas, el número de denuncias es menor que en las ciudades.

La vicepresidenta, Eva Díaz Tezanos, ha presentado hoy, en rueda de prensa, esta iniciativa, que busca sensibilizar contra la violencia de género "invisible" en el ámbito rural, en el que las mujeres tienen más dificultades para acceder a la información y a los servicios de ayuda a las víctimas.

El programa arrancará la próxima semana en Ramales y Colindres, terminará a final de año e incluirá 33 sesiones informativas, abiertas a todos los interesados, hombres y mujeres, ha explicado.

A las sesiones han sido invitadas las asociaciones culturales y de mujeres, los profesionales de los servicios sociales, policías locales y alcaldes y concejales.

Una vez finalizado el programa, se hará un informe complementario que recogerá todas las necesidades que se detecten para seguir avanzado en la lucha contra la violencia de género.

Los objetivos de esta iniciativa son crear un espacio de reflexión sobre la violencia de género, trabajar con herramientas básicas de prevención, dar a conocer todos los recursos a disposición de las mujeres con los que cuenta Cantabria, favorecer "una vida libre de violencia" y mejorar la coordinación de quienes trabajan en esta materia.

La vicepresidenta ha destacado que la elección del medio rural para ponerlo en marcha no es "una decisión caprichosa" sino que parte del análisis de los datos que pública el Consejo General del Poder Judicial sobre violencia de género por partidos judiciales, que indican que existen unas menores tasas de denuncia en aquellos núcleos con una población más reducida.

Así, en 2015 en el partido judicial de Santander se presentaron 734 denuncias y en Torrelavega, 163, mientras que en el de San Vicente hubo 25 y en Reinosa, 24.

Según Díaz Tezanos, el programa pretende tener muy presente los factores que influyen en las mujeres que viven en las distintas zonas de Cantabria a la hora de denunciar o no, como el más difícil acceso en el mundo rural a los servicios e información, lo que supone también que "en muchas ocasiones hay un obstáculo para el reconocimiento de la violencia que se padece" y, derivado de esto, una menor reacción frente a ella.

También los datos de Cantabria de la macroencuesta sobre la violencia de género de 2015 señalan que en los municipios de menor población hay un menor porcentaje de reconocimiento de la violencia padecida.

El aislamiento geográfico y la dispersión de población en núcleos pequeños son así factores que influyen a la hora de reconocer la violencia y como consecuencia, de denunciar e iniciar un procedimiento judicial.

Desde julio, como novedad, no solo se atiende a las mujeres en el centro de asistencia y atención integral a las víctimas de Santander sino que las profesionales se desplazan a los centros territoriales de servicios sociales de Reinosa, Laredo y Torrelavega para que no tengan que acudir al de la capital de la comunidad, con los inconvenientes que eso conlleva, ha recordado Díaz Tezanos, quien ha presentado el nuevo programa junto a la directora general de Igualdad y Mujer, Alicia Renedo.

Es una de las medidas que el Gobierno ha puesto en marcha esta legislatura para mejorar las políticas de lucha contra la violencia de género y la atención a las mujeres que la sufren y a sus hijos, unas políticas, ha insistido, que sufrieron un retroceso en los cuatro años anteriores.

Díaz Tezanos ha recordado que en los presupuestos de 2016 se ha incrementado la partida para la sensibilización, prevención y erradicación de la violencia de género un 24,33 por ciento.

El Gobierno quiere al menos mantener ese aumento en los presupuestos de 2017, en cuyo borrador prevé un nuevo incremento, aunque, según ha recordado la vicepresidenta, se trata aún de un anteproyecto.