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El presupuesto de la Unión Europea para el periodo 2021-2027 no recoge ningún programa o fondo específico para luchar contra la despoblación ni contemplará criterios concretos que visibilicen este problema en el reparto del dinero a cada país, ha destacado este martes el representante de la Comisión Europea en España, Dimitri Barua.

Ha matizado, no obstante, que se promoverá que "los fondos se adapten a cada realidad", también la de la despoblación, y de hecho, España verá aumentado su partida para Desarrollo Regional y Cohesión en un 5 por ciento, lo que eleva la cifra a los 34.000 millones de euros.

Según informa Efe, Barua ha defendido que los gobiernos locales tendrán más influencia en la gestión de los fondos.

En un desayuno informativo con los medios, el representante de la Comisión Europea en España ha detallado en Teruel el proyecto de presupuestos que deberá aprobar el Parlamento Europeo antes de las elecciones de 2019, los primeros presupuestos comunitarios sin el Reino Unido.

Una de las cuestiones más demandadas en Teruel es la lucha contra la despoblación y la necesaria financiación específica para ello.

Al respecto, ha afirmado que "no hay un programa específico para las regiones despobladas" y que tampoco se han tenido en cuenta criterios que primen las ayudas para estas zonas menos pobladas de Europa, tal y como pedían colectivos sociales de Teruel y otras provincias españolas y europeas.

Con todo, Barua ha señalado que los presupuestos están pensados para que "la programación de fondos parta del terreno" y que la asignación pueda "cubrir todas las realidades, incluyendo la despoblación".

En todo caso, ha aclarado que el reparto de fondos para luchar contra la despoblación es "más que un debate europeo", sino "un debate interterritorial", y ha recordado que las comunidades autónomas también "están implicadas en la programación".

Ha aclarado, además, la apuesta en este presupuesto por programas de los que se pueden beneficiar las regiones más despobladas, como los que se planteen en el área de Desarrollo Regional y Cohesión con los Fondos Feder, por ejemplo, o en el Programa LIFE, que duplica su presupuesto.

Del proyecto del presupuesto europeo, Barua ha subrayado que éste se ha centrado en mantener el gasto actual tras la salida del Reino Unido.

En el área de Desarrollo Regional y Cohesión, ha destacado que se plantea simplificar la burocracia para los beneficiarios y los gestores de los fondos y que las regiones de la UE que siguen a la zaga en términos de crecimiento o ingresos, ubicadas en su mayor parte en el sur y el este de Europa, continuarán beneficiándose de importantes ayudas de la UE.

En el caso de España, el aumento de la dotación de los fondos europeos en este área llegará al 5%, elevando la cifra a 34.000 millones de euros.

Además, ha dicho que las autoridades locales, urbanas y territoriales participarán más en la gestión de los fondos de la UE y que un 6% de los fondos irán destinados a iniciativas locales para desarrollo urbano sostenible.

La Política Agrícola Común (PAC) se modernizará con un presupuesto de 365.000 millones y seguirá sustentándose sobre dos pilares: los pagos directos a los agricultores y las ayudas al desarrollo rural.

En esta línea, ha dicho que se simplifican las normas para los agricultores y las administraciones y se incentivará la modernización, la incorporación de los jóvenes y evitar el "agricultor de salón" para premiar al "agricultor genuino".

El proyecto contempla duplicar el programa Erasmus, lo que permitirá triplicar el número de beneficiarios, no solo entre estudiantes universitarios, sino también de formación profesional, que ahora suponen una tercera parte.