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Las asociaciones de agricultores y ganaderos UPA, COAG y Asaja han coincidido en señalar que "aún queda mucho por definir" sobre la reforma de la Política Agraria Común (PAC) dentro de España y han señalado ante el "triunfalismo" del Ministro Arias Cañete que "aún queda mucho por resolver".

La nueva PAC otorgará más capacidad a los Estados para decidir cómo aplicarla en cada territorio, y por tanto las asociaciones creen que será necesario un nuevo ejercicio de negociación con los representantes de las CC.AA. para lograr una implementación nacional de la PAC que evite distorsiones entre agricultores y sectores.

En el día que se ha hecho público el acuerdo de la Unión Europea para la reforma de la PAC, los agricultores y ganaderos han pedido que se escuche su voz en el proceso de negociación a nivel nacional que ahora comienza y han advertido de las carencias de esta nueva política agraria.

El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), Lorenzo Ramos, se ha mostrado prudente en una primera valoración de la nueva PAC afirmando que "a pesar de que las grandes cifras no parecen negativas, aún queda tanto por decidir a nivel nacional que es pronto para saber como se repartirán las ayudas".

En este sentido Ramos ha advertido de que el principal problema español es el de la convergencia interna, que puede "tirar por tierra" a los sectores más productivos y a los agricultores más profesionales.

Según el nuevo acuerdo, los derechos de región tienen que alcanzar como mínimo el 60% del valor medio de esa región y ningún agricultor podrá perder más del 30% del pago que recibe, por ello desde UPA han exigido que la regionalización permitida por la Comisión Europea, con 40 regiones diferentes en España, se lleve a cabo en base a un criterio productivo, de tal manera que se mantenga el nivel de ayuda de los diferentes sectores productivos.

La convergencia interna no se aplicará a los agricultores que cobren menos de 1.250 euros, lo que supone el 46% de las solicitudes a los que tampoco se les aplicará la obligación de cumplir con la condicionalidad ni con el 'greening'.

El secretario general de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Miguel Blanco, ha denunciado que el 70% de los 407.000 preceptores que reciben menos de 1.250 euros no son pequeños agricultores, sino preceptores, es decir, no son profesionales y por lo tanto son ajenos al sector agrario.

Blanco ha remarcado como "inaceptable" que en España se beneficien de las ayudas de la PAC 910.000 preceptores siendo profesionales cotizantes a la Seguridad Social Agraria 350.000, y denuncia que con esta nueva Reforma se perpetúa una situación "tan descabellada".

Por lo tanto, para el lider de COAG frente a la "euforia" de Arias Cañete, la reforma de la PAC no es "un éxito" y sigue siendo "negativa" para los intereses del campo, y especialmente negativa para el modelo social y profesional de la agricultura.

Asaja por su parte, considera que se han cumplido las expectativas de la delegación española y "cree de justicia" felicitar a los representantes ministeriales por el trabajo realizado ante las distintas instituciones comunitarias y sus alianzas con otros países defensores de la PAC.