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La evolución ha sido desigual, ya que si bien las pernoctaciones de residentes han crecido un 13,7 por ciento, las de no residentes han bajado un 7,2 por ciento en el citado periodo.

Los alojamientos de turismo rural han ofrecido 11.955 plazas en enero, lo que ha supuesto un 11,6 por ciento más que en el mismo periodo anterior.

De las plazas ofrecidas se han ocupado un 8,5 por ciento, lo que significa una caída del 1,6 por ciento, mientras que el grado de ocupación en fin de semana se ha situado en el 15,6 por ciento, un 0,3 por ciento más en tasa interanual.

Entre los no residentes, el destino preferido es Canarias, mientras que para los residentes, Castilla y León, Cataluña y Andalucía son los más solicitados.

Canarias ha logrado el mayor grado de ocupación en alojamientos de turismo rural, con el 22,6 por ciento de las plazas ofertadas, seguido de Baleares (11,7%) y Cataluña (11,5%).

Por zonas turísticas, el Pirineo Catalán ha sido el principal destino (23.359 pernoctaciones), mientras que la Isla de Gran Canaria ha logrado la mayor ocupación (25,6%).

El Índice de Precios de Alojamientos de Turismo Rural (IPTR) ha crecido un 1,7 por ciento en tasa interanual en enero de 2009, y es la tarifa de fin de semana, la de mayor peso en la estructura de ponderaciones en enero (56%), la que ha experimentado una subida del 1,6 por ciento.

La modalidad de alquiler, la de uso completo, cuya ponderación es del 70,5%, ha registrado un aumento interanual del 2,2 por ciento.

Por destinos, Castilla y León ha sido el preferido en alojamientos de turismo rural con 54.169 pernoctaciones, un 8 por ciento más que en enero de 2008, y le sigue por preferencia Cataluña con 41.032 pernoctaciones, un 5,2 por ciento más.