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La Asociación para el Desarrollo de Gúdar-Javalambre y Maestrazgo (AGUJAMA) coordina el proyecto de cooperación interterritorial MASOVERA (MAsías SOstenibles. Vivir en Explotaciones Rurales Aisladas) aprobado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino en la convocatoria de subvenciones 2009 en el marco de la Red Rural Nacional.

"El objetivo que se persigue a través del proyecto Masovera es conocer la situación actual de la población que habita en explotaciones rurales aisladas para mejorar su calidad de vida, poner en valor el modelo de sostenibilidad que representan y evitar que se pierda por los múltiples beneficios que supone para la conservación del medio ambiente y su valor etnográfico. Además, se pretende crear sinergias entre diferentes zonas rurales españolas caracterizadas por la presencia de pequeños asentamientos dispersos", explica Esther Ros, la técnico de Agujama que coordina este proyecto.

Una de las acciones desarrolladas ha sido el diagnóstico general del estado del hábitat disperso en todos los territorios participantes. Ya se conocen los frutos de la primera fase del diagnóstico del estado actual de las masías (así se llama a estas explotaciones aisladas en el campo en Cataluña y Aragón, pero en otras zonas de España pueden recibir otros nombres como cortijos, en Andalucía, o caseríos, en Cantabria).

Por ejemplo, en la comarca de Gúdar-Javalambre (Teruel) se han contabilizado 1.542 masías de las cuales la mitad se encuentran en un estado de extremo abandono y unas 300 o 400 arregladas. Sólo 84 masías están habitadas. El perfil de sus habitantes es de una edad media-alta. Gente mayor o próxima a la jubilación y muy pocos de ellos constan como propietarios de la explotación y la vivienda.

Presentan dos tipos de relación con los propietarios: los medieros (viven ahí a cambio de entregar la mitad de la producción al dueño de la explotación) y los arrendatarios. Esta situación conlleva numerosos problemas a la hora de mantener las viviendas en un estado óptimo; muchos propietarios no invierten en su conservación y los inquilinos, al no ser suya, tampoco. Asimismo, pocas familias concentran buena parte de la propiedad y muchas de ellas ni siquiera viven en la provincia de Teruel sino en capitales como Valencia o Barcelona.

También se han detectado deficiencias en el suministro del agua y de la luz. Por ejemplo, placas solares obsoletas o de capacidad insuficiente. Algunos de estos vecinos carecen de un suministro eléctrico suficiente y aún persisten neveras a butano o ausencia de lavadoras. Tampoco llega hasta ellos el servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y sus accesos se realizan a través de pistas de tierra y, en algunos casos, como en el duro invierno de 2009, algunas casas permanecieron aisladas durante semanas por la nieve ya que no llegan hasta ahí los planes de viabilidad invernal que las administraciones ponen en marcha en esos meses.

Otras necesidades detectadas hacen referencia a la carencia o deficiente cobertura en nuevas tecnologías (telefonía móvil e internet) o al riesgo de incendios al que están expuestos al vivir en plena naturaleza. Para luchar para que este modo de vida perdure, hay que mejorar la calidad de vida de estas personas. Por ello, mediante el proyecto Masovera se quiere sacar a la luz estos datos para dejar constancia de la realidad y promover inversiones para mejorar su situación. Para ello, este diagnóstico será enviado a diferentes administraciones (Ayuntamientos, Comarcas, Ministerio de Medioambiente, Rural y Marino).

En la segunda fase del diagnóstico que se está desarrollando, se analizarán los resultados de los trabajos realizados en cada zona y se estudiarán las posibles alternativas y soluciones a las necesidades detectadas. Por ejemplo, trasladando a los Servicios Sociales los casos de necesidad de asistencia que hayan detectado, informando a los propietarios de ayudas o subvenciones para acometer reformas o mejorando el acceso a la electricidad.

En 2011 comenzará la etapa de ejecución del proyecto, en la que se darán a conocer los resultados del diagnóstico y se pondrán en marcha pequeñas experiencias piloto en materia de energías renovables, depuración ecológica, nuevas tecnologías, cultivos alternativos etcétera.

Las entidades que participan en el proyecto MASOVERA son:

- Asociación para el Desarrollo de Gçudar-Javalambre, AGUJA (Teruel).

- Sociedad para el Desarrollo Rural INTEGRAL (Murcia).

- Consorci per al Desenvolupament de la Catalunya Central, LEADER CAT CENTRAL (Lérida).

- Asociación para la promoción y el desarrollo de la Comarca de Los Vélez APROVÉLEZ (Almería).

- Asociación Grupo de Acción Local Comarca Asón-Agüera (Cantabria).

- Asociación de Desenvolvemento Rural Ancares Courel (Lugo).