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• 130 iniciativas de agricultores, ganaderos y gestores forestales tienen en común la reducción de combustible vegetal con actividades productivas

La consejera de Medio Ambiente, Begoña García, ha destacado la importancia del proyecto Mosaico como un freno frente a los incendios forestales y frente al despoblamiento que se produce en la mayoría de los pequeños pueblos de montaña.

Así lo ha expresado la responsable regional en Plasencia durante un encuentro con profesionales y empresarios, organizada por la Universidad de Extremadura en colaboración con el Círculo Empresarial de Plasencia.

Begoña García se ha referido a la puesta en marcha de este tipo de reuniones y jornadas de trabajo e información «en torno a una de las iniciativas novedosas que estamos impulsando en el marco de una nueva política forestal», ha dicho.

Ha agregado que, en este marco, «se están impulsando unas 130 iniciativas de agricultores, ganaderos y gestores forestales que tienen en común la reducción de combustible vegetal con actividades productivas».

La consejera ha señalado que las acciones enmarcadas en el Proyecto Mosaico se basan en la investigación e innovación con inversiones importantes en pequeñas obras que en su inmensa mayoría son ejecutadas por empresas extremeñas que generan empleo en zonas rurales.

En cuanto a medidas ya concretadas, la responsable de Medio Ambiente y Rural, Políticas Agrarias y Territorio ha destacado los cinco millones invertidos para la limpieza y acondicionamiento de la superficie que resultó afectada por el incendio ocurrido en Gata en el verano de 2015.

Asimismo, ha explicado que la Administración regional ha asumido las actuaciones periurbanas municipales en todos los municipios de Las Hurdes y en aquellos de Sierra de Gata con alto riesgo de incendios, con un presupuesto de 1,3 millones de euros.

Por otro lado, ha señalado que la Consejería de Medio Ambiente ha puesto en marcha medidas legislativas para poder hacer labores preventivas frente a los incendios incluso en terrenos privados de alto riesgo.

Dichas medidas se van a concretar este año en planes de actuación en los pinares del valle del Árrago y en el entorno del Jola, con un presupuesto global de 3,1 millones.