REDR

Matallana de Torío, Cuadros, Villablino, Murias de Paredes y Brañuelas acogen ya los cinco primeros espacios para poder teletrabajar Dar oportunidades a las personas que residen de forma permanente o temporal en los pueblos es uno de los principales objetivos de la red de coworking que ha puesto en marcha el grupo de acción local Cuatro Valles. En concreto, dentro de los 25 municipios que forman parte del territorio en el que este veterano GAL (el año que viene cumplirá 30 años) desarrolla su actividad, son cinco los ayuntamientos que ya han habilitados espacios para que se pueda trabajar desde ellos, con todos los servicios necesarios y conexión a la red: Villablino (que ha creado un edificio espectacular en la localidad de Caboalles de Arriba), Murias de Paredes, Matallana de Torío, Canales-La Magdalena (donde se encuentra la sede de Cuatro Valles), Cuadros y Brañuelas.

El proyecto consiste en que no sólo se habilitan en el medio rural esos espacios cada vez más habituales en las ciudades (el acto de ayer se celebró en el máss céntrico de ellas, creado por el Banco Santander) sino que además se busca la colaboración, el trabajo en red, de modo que no sólo estos cinco espacios están conectados entre sí con el objetivo de que puedan surgir sinergias y actividades colaborativas entre los diferentes usuarios, sino que además hay otra red superior que es la pretende aglutinar a todos los coworking que se han habilitado en los pueblos de Castilla y León.

La alcaldesa de Murias de Paredes y presidenta de Cuatro Valles, Mari Carmen Mallo, fue la encargada de abrir el acto de este jueves, en el que también intervinieron para detallar el proyecto tanto la gerente del mencionado GAL, Marta García Suárez, como la técnico Mar García Alonso. Además, asistieron alcaldes de varios municipios que se han sumado a esta iniciativa y que con su trabajo quieren facilitar todas las posibilidades a aquellos que quieran teletrabajar desde sus respectivos municipios, como fue el caso de Mario Rivas (Villablino), Marcos Martínez Barazón (Cuadros) y José García (Matallana de Torío). Una iniciativa más que interesante que demuestra que, cuando se quiere, se puede luchar contra la despoblación.